Niña decapitada: Ana Josefa era una madre servicial, según iglesia

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Tras la tragedia de Ana Josefa García Cuello, la médico militar acusada de decapitar a su hija de seis años el pasado jueves 15 de agosto, la iglesia Monte Moriah ofreció una rueda de prensa para explicar lo sucedido.

Fernando Suero, director de Comunicación de la iglesia, explicó que Ana Josefa siempre había sido una mujer ejemplar. “Ana Josefa siempre fue una mujer servicial, de familia, una madre ejemplar y una gran profesional”, declaró.

Además, tuvo unas palabras para comentar cómo era la niña fallecida.

Era una niña sobresaliente 

“El tiempo que la tuvimos con nosotros recibió todo el apoyo de su familia, lo que caracterizaba a nuestra hermana Josefa. Era una niña sobresaliente. Ninguna niña que recibiera maltrato tendría ese buen comportamiento”, explicó Suero.

La salud mental de Ana Josefa

Ana Josefa podría ser declarada «inimputable» si se confirma que padece esquizofrenia, según los artículos 374, 375 y 376 del Código Procesal Penal.

El obispo Manuel Arquímedes Terrero, también presente en la rueda de prensa, hizo referencia a la salud mental de la imputada. “Todo el mundo sabe que esa persona no estaba en sus cabales”, aclaró.

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A su vez, Fernando Suero explicó que “nuestro pastor está siendo intervenido y acompañado. Le aconsejamos que tiene que guardar sus emociones. La iglesia ha dispuesto de los profesionales cualificados para este tipo de situaciones”.

En cuanto a la falta de declaraciones de la iglesia durante más de 10 días, dio esta explicación: “La iglesia nunca estuvo cerrada. Pero no teníamos la información suficiente para salir a declarar”.

Había dejado de tomar sus medicamentos

Según el portavoz de la iglesia, Ana Josefa “anteriormente había sido tratada y ella estaba tomando medicamentos. El evento ocurrió cuando ella dejó de tomar esos medicamentos”.

Sin embargo, aclaró que “no había ninguna conducta extraña. Nosotros fuimos sorprendidos tanto como ustedes”.

Fernando Suero también hizo un llamado al Gobierno. “Solicitamos al Gobierno dominicano más recursos para cuidar la salud mental de los dominicanos. Porque eso nos puede pasar a cualquiera”, comentó.

Malinterpretar la palabra de Dios

Al responder preguntas, el obispo Manuel Arquímedes fue preguntado acerca de qué pasaje de la Biblia estuvieron leyendo el día de la tragedia. Sin embargo, no tenía esa información.

En cuanto a la interpretación de las escrituras, comentó que “hay temas que salen en la Biblia que uno tiene que ser un teólogo para poder interpretar”. Resaltó que Ana Josefa, en su situación mental, no tenía la capacidad de pensar correctamente a la hora de interpretar la palabra.

Pasaje en el que Dios pide el sacrificio de un hijo

En Génesis 22, que forma parte del Antiguo Testamento de la Biblia, Dios le pidió a Abraham que sacrificara a su hijo. Así está escrito:

“Luego Dios dijo: —Toma a Isaac, tu amado hijo único, ve a la tierra de Moria y ofrécelo como un sacrificio que debe quemarse completamente, en la montaña que yo te indicaré.”

Este sacrificio que Dios le pidió a Abraham, ocurrió en el Monte Moriah, según las escrituras. Sin embargo, en la Biblia Abraham no sacrificó a su hijo, pues Dios lo detuvo en el último instante. 

Ana Josefa, por su parte, en su supuesto estado esquizofrénico, sí acabó con la vida de su hija. No se sabe los motivos por los que lo hizo. Sin embargo, lo que sí es verdad es que la iglesia a la que acudía Ana Josefa se llama Monte Moriah, el nombre del lugar en el que la Biblia narra el sacrificio de Isaac por parte de Abraham.