Amarante Baret cuestiona Cámara de Cuentas tras auditoría al Minerd
El extitular del Ministerio de Educación de República Dominicana (Minerd), Carlos Amarante Baret, dijo que los actuales miembros de la Cámara de Cuentas están “invalidados éticamente” para cuestionar su gestión en la entidad educativa después de los “tantos escándalos” en los que se les ha señalado.
Amarante Baret atribuyó a una “mala fe” y a un afán de mantenerse en sus puestos que el Pleno del organismo fiscalizador haya ignorado sus aclaraciones a la auditoría que se publicó la semana pasada y en la que se cuestiona ocho meses de su desempeño en el Minerd.
Los actuales miembros del organismo son Janel Ramírez Sánchez, presidente, Elsa María Catano Ramírez, Tomasina Tolentino Mckenzie, Mario Arturo Fernández Burgos y Elsa Peña Peña, quienes tuvieron fuertes conflictos internos que casi provoca su destitución en un juicio político.
En un documento enviado a Diario Libre, Amarante Baret indicó que le “resulta perturbador” que muchas de sus aclaraciones sobre los hallazgos de la auditoría “fueron ignoradas, sin otra explicación que no sea la voluntad de manipulación patente en su informe final”.
En el 2021, Carlos Amarante Baret también criticó al Pleno de ese entonces de la Cámara de Cuentas por una evaluación a una parte de su gestión en el Minerd y que fue enviada por el organismo fiscalizador a la Procuraduría Especializada de Persecución a la Corrupción Administrativa (Pepca).
Los miembros de la Cámara Cuentas de ese entonces, presidida por Hugo Álvarez Pérez e integrada por Pedro Antonio Ortiz Hernández, Carlos Noés Tejada Díaz, Margarita Melenciano Corporán y Félix Álvarez Rivera, a quienes también el Ministerio Público le inició una investigación que se denominó Operación Caracol.
El documento íntegro de Carlos Amarante Baret sobre actual CC:
Amarante Baret responde y cuestiona a la Cámara de Cuentas
Cuando pensábamos que los actuales miembros de la Cámara de Cuentas se preparaban para salir de dicha institución como consecuencia de los múltiples escándalos en que se han visto envueltos varios de sus integrantes y del evidente abandono de las funciones para las cuales fueron designados, el Pleno da a conocer el informe final de la auditoría financiera practicada al Ministerio de Educación (MINERD) sobre los tres años que van del 1ero. de enero del 2016 al 31 de diciembre del 2018.
Después de tantos escándalos que han invalidado éticamente a la actual Cámara de Cuentas, nada mejor que provocar un gran titular para reivindicarse y tratar de seguir en sus puestos: Inobservancias en la ejecución del 4% del PIB para la educación. Saben que ese tema, tan sensible, da buenos titulares para tapar sus propias faltas.
En lo que a mí respecta, de esta auditoría que abarca tres años y dos Ministros de Educación, solo aplican los primeros 8 meses y 16 días de gestión, es decir, los que van del 1ro. de enero del 2016 al 16 de agosto del mismo año. Vale decir que en su momento, presenté a la Cámara una respuesta detallada acerca de cada uno de los supuestos hallazgos encontrados, con las debidas explicaciones y sustentos documentales. Sin embargo, resulta perturbador constatar que muchas de nuestras aclaraciones fueron ignoradas, sin otra explicación que no sea la voluntad de manipulación patente en su informe final.
Para que la sociedad y la opinión pública se percaten de la mala fe de los actuales miembros de la Cámara de Cuentas, señalaré algunas respuestas a sus “hallazgos” que fueron ignoradas, Veamos.
1. Dice el informe que se construyeron decenas de planteles escolares “sin aprobación de sus planos por la autoridad competente” por una suma de más de tres mil millones de pesos. Pero ¿no era la misma “autoridad competente”, el Ministerio de Obras Públicas, a quien el decreto 625-12 (en el párrafo del artículo 7) instruyó como responsable de todo lo concerniente al diseño de los planos del Programa Nacional de Edificaciones Escolares de acuerdo a las leyes y reglamentos de construcción vigentes? Bien sabe la Cámara que esos planos fueron diseñados en el propio MOPC y enviados al ministerio; por tanto, solo la mala fe explica que ese supuesto hallazgo se mantuviera en el informe final.
2. ¿Por qué la Cámara de Cuentas ignora el Convenio de Colaboración Interinstitucional entre el MINERD y el Ministerio Administrativo de la Presidencia No.1197, de fecha 19 de septiembre del 2014 y su correspondiente adenda de fecha 30 de marzo del 2015 que regulaban la entrega de vehículos a entidades educativas por parte de la Presidencia de la República? Además de que se le dio copia a los auditores, preciso es destacar que nunca se extravió un solo vehículo de los adquiridos por el MINERD en nuestra gestión.
3. Solo la mala fe puede llevar a la Cámara de Cuentas a ignorar que nuestra gestión le tocó implementar el nuevo modelo de gestión financiera DYNAMICS AX, lo que implicó migrar del viejo sistema cuasi manual FINANZAS 2000 de una manera progresiva, lo cual explica ciertos desfases o inconsistencias o inobservancias en los registros contables, sin que esto implique algo doloso. Fue en nuestra gestión que se levantaron por primera vez unos Estados Financieros en el Ministerio de Educación. La Cámara lo sabe, pero no le importó.
4. ¿Qué razón oculta tiene la Cámara de Cuentas para afirmar que los almacenes en Haina y Mendoza, de mobiliarios y equipos, estaban en un ambiente inapropiado cuando la realidad es que estos almacenes contaban con extintores y se fumigaban periódicamente y que el almacén que alojaba los equipos de tecnología contaba con cámaras de seguridad en todas sus áreas y los otros que no contaban con cámaras de seguridad tenían vigilancia permanente (vigilantes armados)?
5. ¿Por qué no entiende la Cámara de Cuentas que si había cierta tardanza en registrar algunos depósitos, esto se debía a que eran ejecuciones que hacían los Distritos y Regionales Escolares, los cuales depositaban o reembolsaban los recursos sobrantes y luego enviaban los recibos o vouchers a la institución? ¿Cuál es la” inobservancia” para publicarla en un informe y en los periódicos?
6. La Cámara de Cuentas detectó, en el área de la Dirección de Tecnología, algunas debilidades en la gestión de los respaldos de información y al momento de terminar nuestra gestión en el MINERD, ya habíamos iniciado el proceso de implementación de respaldo de la información, a través de la solución AZURE de Microsoft.
7. La Cámara criticó la no aplicación de la normativa Nortic A7 que fue publicada en abril del 2016, la cual nos fue remitida en junio por la OPTIC, y de inmediato comenzamos las coordinaciones de lugar para ajustar los procedimientos de la DGTIC en aras de implementar los requerimientos, pero nuestras funciones terminaron el 16 de agosto del 2016.
8. Para todas las debilidades referidas a diseño y ausencia de controles, ausencia de herramientas de monitoreo de los controles TI concernientes a una Política General de Seguridad de la Información y procedimientos TIC, teníamos una respuesta común: En el mes de abril del 2016 lanzamos la licitación ME-CCC-LPN-2016-04-GD, con el objetivo de remodelar, actualizar y modernizar el centro de datos.
9. Esta licitación, sin embargo, una vez concluido el proceso electoral de mayo, preferimos, por razones de prudencia y transparencia, suspenderla para que fuera la gestión que iniciaba el 16 de agosto del 2016, la que procediera a realizar dicho proceso.
Yo, Carlos Amarante Baret, siempre daré la cara para explicar todo lo que sea necesario respecto de mi paso por la administración pública; es mi deber, pues manejo fondos de la sociedad. Lo que nunca permitiré, con mi silencio, es que por razones políticas, personas agazapadas en una institución del Estado, como lo es la Cámara de Cuentas, pretendan manchar mi buena honra y mi honestidad a toda prueba con sus insinuaciones aviesas.
La evaluación que hizo la Cámara de Cuentas al Minerd, correspondió a sus estados financieros desde el 1 de enero de 2016 hasta el 31 de diciembre de 2018 y que arrojó “inobservancias a disposiciones legales y contables” por valor de 253 mil 474 millones de pesos.
En ese período quienes ocuparon la cartera fueron Carlos Amarante Baret (primero) y Andrés Navarro (segundo), designados por el entonces presidente de la República, Danilo Medina, en su primer y segundo mandato.