Después de que las primeras cuatro jornadas del operativo de repatriación se destacaran por su intensidad, en los últimos dos días predomina la inquietud e indecisión de salir a las calles por parte de la comunidad haitiana que residente en la capital dominicana.

Aunque la Dirección General de Migración comunicó este martes que desde el 1 de octubre hasta el domingo 6 se interdictaron más 9 mil migrantes en condición irregular, el ambiente árido en los barrios, las construcciones, e incluso en la entrada del Centro de Acogida Vacacional de Haina, son un ejemplo de la decadencia en los últimos días. 

Ya no se ven camiones repletos de migrantes y, aparentemente, el flujo de detenciones ha bajado, al menos eso se contempla en puntos como Ciudad Juan Bosch, Los Frailes y “El Pequeño Haití”.

El operativo de la Dirección General de Migración (DGM) que quiere alcanzar la repatriación de 10,000 haitianos a la semana iniciado por el Gobierno se encuentra en un aparente estatus tranquilo.

Un equipo de Diario Libre realizó una ruta durante la mañana del martes 8 de octubre desde Ciudad Juan Bosch hasta el Centro de Acogida Vacacional de Haina, pasando por Los Frailes y “El Pequeño Haití”, y comprobó que las actividades por parte de las autoridades eran casi nulas. Tan solo observaron un camión en ruta con un retenido en su interior y decomisando varios motores.

En el “Pequeño Haití”, las calles guardaban un estado de intranquilidad. Algunos de los comercios estaban vacíos, los puntos de venta sin gente y a los balcones de los apartamentos solo salían los valientes, mientras otros se escondían en la fachada cuando veían la cámara de Diario Libre.

Esta situación se viene fraguando desde ayer, pues tampoco hubo movimiento alguno a las puertas del Centro de Haina. Apenas dos camiones entraron a las instalaciones y lo abandonaron al momento. También como hoy, se encontraron algunas personas a las afueras, familiares, amigos y compañeros de trabajo, que esperaban poder comunicarse con las personas del interior.

Disminución en Santiago 

En las calles de la provincia Santiago, al norte de República Dominicana, ocurre la misma situación, se empieza a notar una disminución considerable de ciudadanos haitianos. Durante un recorrido de Diario Libre por las distintas arterias del Centro Histórico de la Ciudad Corazón, la presencia de extranjeros era escasa. 

Se notó en ubicaciones como la calle 16 de Agosto, en el tramo comprendido entre las calles 30 de Marzo y España, donde los haitianos comercializan y compran mercancías en plena vía pública. Lo mismo ocurre en las calles 30 de Marzo, Del Sol, Sabana Larga, Restauración, Antonio Guzmán, entre otras.

Los comerciantes dominicanos establecidos en la parte céntrica de la ciudad señalaron que los operativos de la Dirección General de Migración han sido permanentes desde el pasado jueves y que, desde entonces, las ventas se han desplomado debido a que los extranjeros son los principales compradores.